Volver al índice Suplementos | ¡Libertad a los trabajadores de Las Heras! |
LLAMAMIENTO DE URGENCIA DE LA FRACCION LENINISTA TROTSKISTA
A LAS ORGANIZACIONES OBRERAS, CAMPESINAS, ESTUDIANTILES DE ARGENTINA, AMÉRICA Y EL MUNDO
¡Libertad!
a los trabajadores presos de Las Heras
Aparición con vida de Julio López
¡Juicio y castigo a todos los genocidas de ayer y represores de hoy, todos asesinos de los trabajadores y el pueblo!
7 de Febrero: jornada internacional de lucha
En los próximos días se cumple un año del momento en que en Las Heras, Argentina, se concentró un brutal ataque del gobierno de Kirchner, sirviente del imperialismo y los monopolios petroleros, contra los trabajadores y los explotados de esta ciudad.
Una huelga de 12 días de los obreros petroleros contra el impuesto a sus salarios y por iguales condiciones de trabajo para todos, -que para luchar habían echado a los dirigentes traidores de la burocracia sindical del gremio afiliada a la CGT- fue reprimida, y uno de sus dirigentes, Navarro, fue preso.
El 7 de febrero de 2006, los obreros huelguistas junto a los explotados de esa ciudad, para reclamar la liberación de su dirigente preso, se movilizaron a la comisaría donde fueron recibidos por la policía a balazo limpio. Esta policía “brava” era la misma que poco tiempo antes había reprimido ferozmente a los trabajadores desocupados y sus familias, que reclamaban por trabajo en la TERMAP, la terminal portuaria petrolera de la vecina ciudad de Caleta Olivia. Allí golpearon a hombres, niños y mujeres embarazadas, una de las cuales perdió su embarazo a patadas en el vientre, y resultó preso Cristian Ruiz que estuvo más de un año como rehén de las petroleras y el gobierno.
En Las Heras, el 7 de febrero de 2006, ante la brutal represión desatada por estos asesinos, los trabajadores ejercieron su derecho a la legítima defensa, y lograron rescatar a Navarro. En medio de esa batalla campal, murió un policía represor llamado Sayago.
La respuesta de la Repsol, Kirchner y la patronal junto a esa vieja zorra contrarrevolucionaria que es la iglesia, con el apoyo y la complicidad abierta de la burocracia sindical, no se hizo esperar. Primero, con el Ministerio de Trabajo, impusieron la conciliación obligatoria por 30 días para que los obreros levantaran la lucha. Y una vez que ésta fue desactivada, el 23 de febrero lanzaron un feroz ataque represivo contra los trabajadores y el pueblo de Las Heras. La ciudad fue militarizada con la gendarmería que, junto a la policía y agentes de los servicios de inteligencia, impusieron de hecho un estado de sitio al mejor estilo de la dictadura videlista, y sembraron el terror entre los trabajadores y sus familias: las tropas de ocupación allanaban los hogares obreros deteniendo a los trabajadores e inclusive a sus hijos. Los helicópteros sobrevolaban la ciudad, y durante la noche, los represores dejaban sin luz a la ciudad para que en sus calles los activistas obreros fueran secuestrados por autos sin patente (para que no pudieran ser identificados) y sometidos a interrogatorios bajo tortura. Todo esto se realizaba bajo la supervisión de la jueza Ruata de Leone. El resultado: 19 compañeros detenidos, de los cuales hoy quedan 7 todavía presos, que van a ser llevados a juicio acusados por la muerte del represor Sayago.
La saña de la respuesta de la patronal, el gobierno de Kirchner, el régimen infame y de sus tropas de ocupación, se debe a que los trabajadores, con su huelga y las ocupaciones de los pozos, osaron tocar los intereses de los monopolios petroleros imperialistas, los mismos monopolios que como la Halliburton, British, la Repsol, la Panamerican, la Totalfina, han lanzado sus “guerras del petróleo” en Irak, en Bolivia, Irán, Ecuador y en todo el mundo, y a los que no les importa arrasar ciudades enteras y masacrar a los explotados como hicieron en Fallujah en Irak, u ocuparlas militarmente como en Las Heras, para mantener sus superganancias.
La lucha de los trabajadores de Las Heras demostró claramente quiénes son los únicos que enfrentan la voracidad imperialista y defienden las riquezas de nuestros países, mientras los gobiernos sirvientes del imperialismo y los monopolios se someten. Demostraban ser la única fuerza verdaderamente nacional que enfrentaba al imperialismo, y tenían por lo tanto, el legítimo derecho de defender sus vidas, sus hogares y sus familias de estas verdaderas tropas de ocupación al servicio de la burguesía y los monopolios internacionales.
La patronal y el gobierno de Kirchner –que venían de pagarle 10.000 millones de dólares en efectivo al FMI y querían recuperarlos- eran conscientes de que la lucha de Las Heras amenazaba con convertirse en un reclamo de todo el movimiento obrero y con hacer saltar por los aires los planes de superexplotación, hambre y esclavitud basados en la reducción salarial y la precarización extrema de los trabajadores, cuya expresión era el techo del 19% de aumento salarial puesto por el gobierno para las discusiones paritarias, porque abría la posibilidad de generalizar y unificar la lucha de toda la clase obrera. Amenazaba con romper el pacto social del gobierno, la patronal y los traidores de la burocracia sindical de la CGT y el CTA que sostenían al régimen y a todo el ciclo de superganancias patronales.
Era imperioso para las petroleras imperialistas y el gobierno de Kirchner dar un escarmiento ejemplar a los trabajadores y los explotados, aplastando y derrotando a los obreros de Las Heras, y no les tembló el pulso para hacerlo. La derrota de esa heroica lucha y luego la imposición de las paritarias del 19%, fueron dos hitos decisivos para que el infame régimen del pacto social terminara pariendo el kirchnerato.
Fue a partir de la derrota de los trabajadores en Las Heras que esta política represiva, donde las fuerzas burguesas actuaban todas centralizadas y concentradas contra las huelgas obreras aisladas, volvería a repetirse ante cada huelga que cuestionara los intereses monopólicos, como acaba de suceder en la huelga petrolera de la empresa PRIDE, en la provincia de Neuquén (Argentina). Los matones de las burocracias sindicales –que en los ‘70 integraron gustosos las 3 A asesina de activistas obreros y que hoy vuelven a ponerse al servicio de las distintas fracciones patronales que son las que les pagan, y por las que son capaces de matarse entre ellos, como mostraron los sucesos de San Vicente- y actúan protegidos por la policía, se han hecho un arma de uso corriente contra la protesta obrera. Como lo demostraron las huelgas de TVB (ex Jabón Federal), el Hospital Francés, SIDERAR, etc., y también la agresión a delegados y dirigentes obreros como el “Pollo” Sobrero, Edgardo Quiroga, Omar Rombolá, etc.
Fue en Las Heras donde quedó al desnudo que tras la máscara de “progresista” y de “defensor de los derechos humanos” de Kirchner, se ocultaba el verdadero rostro de su gobierno y del régimen del pacto social: el de la más cruel represión contra los trabajadores y el pueblo, con los peores métodos de las dictaduras militares, si osan levantarse contra los intereses de sus amos.
Nada de “progresivo” o de “defensor de los derechos humanos” tiene un gobierno que mantiene intactas las fuerzas de represión de la dictadura y aplica la misma política de impunidad de sus antecesores, Alfonsín, Menem, De la Rúa y Duhalde. Dirige las mismas Fuerzas Armadas, la misma policía y los mismos servicios de inteligencia continuadores de las que actuaban primero en la Triple A y que luego, cuando esa banda fascista no fue suficiente para detener la lucha revolucionaria de la clase obrera, ejecutaron el golpe militar, la dictadura y el genocidio. Son todos culpables, los genocidas de ayer y los represores de hoy. Parte de esas mismas fuerzas armadas y de seguridad genocida era el represor Sayago.
Son estos mismos genocidas y fuerzas de seguridad –es decir, miles de “Sayagos” en acción- los que cobijan en su interior a los culpables de la desaparición de Julio López, uno de los testigos centrales de los juicios contra los genocidas de la dictadura militar, y también a los culpables de los secuestros y torturas de Gerez y Bustos, luego aparecidos.
Son los mismos militares, policías y servicios de inteligencia genocidas a los que, desde la caída de la dictadura militar en 1982, todos los partidos políticos y gobiernos patronales del régimen infame de la Constitución de 1853-1994 han salvado y les han garantizado la impunidad. Son los mismos perros de presa de la patronal y su estado que, bajo los sucesivos gobiernos de Alfonsín, Menem, De La Rúa y Kirchner, asesinaron bajo sus órdenes a Víctor Choque, Teresa Rodríguez, Aníbal Verón, los 40 mártires obreros y populares caídos el 19 y 20 de diciembre de 2001, Kosteki y Santillán, y que hoy secuestraron a Julio López.
El asesinato en los barrios de jóvenes obreros e hijos de obreros a manos de la policía del “gatillo fácil” como sucedió con Darian Barzábal en Los Hornos (La Plata), antes en Mendoza con Mauricio Morán, con Walter Bulacio bajo el gobierno de Menem y miles de otros jóvenes; o su “desaparición” como hicieron con Miguel Bru en La Plata hace ya años, son otra prueba irrefutable del accionar de estos represores asesinos.
Después de aplastar en Las Heras, el gobierno de Kirchner puso en marcha un nuevo plan de salvataje de las Fuerzas Armadas y de represión genocidas y asesinas de los trabajadores y el pueblo, plan que cuenta con el beneplácito de Hebe de Bonafini y Carlotto que han dicho que “ya no hay un enemigo en la Rosada”. Así, ha puesto a la casta de jueces peronistas-videlistas-radicales –los mismos que garantizaron la impunidad de los genocidas en los últimos 25 años- a enjuiciar a un puñado de militares y represores e inclusive a algunos jefes de la Triple A, todos ya viejos y decrépitos, a quienes, cuanto mucho, se les dará prisión domiciliaria, para así justificar, con la “teoría de los dos demonios”, que los luchadores presos de Las Heras se pudran en la cárcel, y la represión y el encarcelamiento a todo trabajador que ose protestar y a los que mantendrán en las cárceles como verdaderos rehenes, para que sirvan de escarmiento al conjunto de los trabajadores. ¡No les reconocemos a estos jueces ni a la justicia de las clases enemigas de los trabajadores ninguna autoridad para encarcelar y juzgar a nuestros hermanos de clase!
¡Abajo la burocracia sindical de la CGT y la CTA, cómplice del encarcelamiento de los luchadores de Las Heras y de su derrota, traidora de los combates de la resistencia obrera contra el kirchnerato, y que se apresta a entregar una vez más el salario obrero en nuevas paritarias del hambre!
De la derrota en Las Heras y de que 7 compañeros continúen presos como rehenes de la Repsol, la patronal y el kirchnerato, es cómplice y responsable directa la burocracia sindical de la CGT y el CTA. La burocracia del sindicato petrolero de la CGT actuó directamente como rompehuelga al servicio del estado mayor de las petroleras, la patronal, el gobierno y sus fuerzas de ocupación en Las Heras; mientras que De Gennaro y la burocracia de la CTA no movieron un dedo y garantizaron que Las Heras quedara aislada y los compañeros presos. Es que venían de estar en el Consejo del Salario, y de acordar a espaldas de los trabajadores el techo de 19% para las paritarias.
Traicionaron en Las Heras, entregaron el salario y las conquistas obreras en esas paritarias, y luego, cuando comenzaron en las fábricas las rebeliones obreras contra esas paritarias, traicionaron una a una esas luchas y los heroicos combates de la resistencia obrera contra el kirchnerato, como el de Jabón Federal, la Pride, el Hospital Francés, telefónicos, etc., no dudando en mandar a sus matones a apalear a los obreros.
Hoy, después de un año de traiciones y entregadas, la burocracia sindical se prepara, una vez más, para garantizarles a los monopolios imperialistas, la patronal esclavista, a su régimen y al gobierno de Kirchner un nuevo robo al salario obrero para que puedan mantener el ciclo de crecimiento y sus fabulosas ganancias. Mientras la inflación en 2006 fue de entre el 23 y el 30% -contra la mentira del gobierno que dice que fue del 9,8%- la burocracia, la patronal y Kirchner preparan nuevas paritarias con un techo de aumento salarial del 10 o 12% -que además, sólo corren para una minoría de la clase obrera y dejan afuera a la amplia mayoría que está en negro, contratada, tercerizada, y desocupada.
¡Abajo la burocracia sindical de la CGT y la CTA, cómplice del encarcelamiento de los luchadores de Las Heras, esa que desde los sindicatos estatizados y con su pacto social, sostiene al kirchnerato cipayo, hambreador y represor del pueblo! Mientras continúen presos en Argentina los luchadores obreros de Las Heras, será imposible conseguir que Julio López aparezca con vida, o el desprocesamiento de los más de 4500 luchadores obreros y populares procesados o defender a los dirigentes como Sobrero, los dirigentes de la FUBA, Quiroga, etc. Mucho menos podrá pararse el ataque a nuestro nivel de vida, ni impedir que pasen las nuevas paritarias de salarios de hambre -mientras la inflación es cada vez más alta- que nos condenan cada vez más a la esclavitud y la miseria.
¡Abajo esa casta de burócratas millonarios pagados con miles de millones de dólares de las obras sociales y los descuentos compulsivos de las cuotas sindicales, que actúan como verdaderos carceleros de los trabajadores; que envían a sus matones para aterrorizar a los trabajadores e impedirnos luchar contra el nuevo robo del salario que preparan la patronal y el gobierno! ¡Fuera las manos de la patronal y del estado de las organizaciones obreras! ¡Fuera el Ministerio de Trabajo –un verdadero ministerio de la esclavitud obrera- y sus conciliaciones obligatorias!
Cada trabajador que sale a la lucha, sabe que le puede pasar lo mismo que a los petroleros de Las Heras. Por eso hay que arrancarlos de manos de la patronal y el estado que los tienen como rehenes.
¿Cómo luchar sino contra la nueva ofensiva que preparan con las paritarias del 10% para el 2007? ¿Cómo enfrentar las paritarias fraudulentas y por sector, e imponer $ 2.500 de salario básico indexado según la inflación para todos los trabajadores! ¡Basta de impuesto al salario! ¡Trabajo digno para todos reduciendo la jornada laboral y repartiendo las horas de trabajo entre todas las manos disponibles, con un básico de $ 2.500! ¡Basta de trabajo en negro, subcontratación y tercerización: todos a planta permanente! ¡A igual trabajo, igual salario y condiciones de convenio, etc.! Es decir un pliego único de reclamos de todo el movimiento obrero, ocupado y desocupado, efectivo, en negro, contratado, nativo o inmigrante, sindicalizado o no.
Solamente podremos hacerlo recuperando la unidad de las filas obreras para pelear, y eso comienza por hacer carne el grito de “¡Si tocan a uno nos tocan a todos!”, es decir, comienza por levantar la libertad inmediata de los compañeros de Las Heras, la aparición de López y el desprocesamiento de todos los luchadores perseguidos, y por preparar, impulsando asambleas en cada fábrica y establecimiento, la guerra obrera contra las nuevas paritarias del hambre de la patronal, el gobierno y los traidores de la burocraciasindical.
El escandaloso silencio que sobre los presos de Las Heras guarda la izquierda reformista, sirviente del Ministerio de Trabajo y del “frente democrático” con Kirchner
Cuando faltan apenas días para que se cumpla un año de los acontecimientos de Las Heras, es atronador y escandaloso el silencio que, sobre los 7 compañeros presos, siguen guardando las corrientes de la izquierda reformista en todas sus variantes, ya sean stalinistas, de los renegados del trotskismo, o los ex dirigentes sindicales morenistas del MAS de los ’80, hoy “independientes”, devenidos en nueva burocracia sindical “de izquierda”, muchos de ellos integrantes hoy del “Movimiento Intersindical Clasista” (MIC) .
Han hecho decenas de reuniones para organizar la movilización por la aparición con vida de López, por el esclarecimiento del secuestro de Gerez, y de los ataques a delegados obreros como Sobrero, etc. Pero ni una sola vez han levantado la libertad a los presos de Las Heras, y mucho menos han organizado alguna medida de lucha por su libertad.
Todos esconden bajo la alfombra a los compañeros presos de Las Heras porque quieren esconder que, mientras las fuerzas de ocupación de la Repsol y Kirchner irrumpían en la ciudad, todos ellos estaban sosteniendo y paseando por todo el país al stalinista Navarro, militante del PC, ese traidor de la lucha de Las Heras que después de que los obreros en huelga lo liberaron de la cárcel, salió a condolerse por la muerte del “compañero policía” -el represor Sayago- y a exigir que “intervenga la justicia para esclarecer el hecho”, abriendo así la puerta a la feroz represión y persecución contra los trabajadores que desataron la Repsol, la patronal y el gobierno de Kirchne, con la colaboración de la burocracia.
Todos quieren ocultar que, junto con Navarro, llamaron a los trabajadores de Las Heras a confiar en que con la conciliación obligatoria y negociando en el Ministerio de Trabajo iban a conseguir sus demandas; que los llamaron a confiar en la justicia y en que la patronal iba a respetar el acuerdo firmado el 8 de febrero de que les daría sus demandas, cuándo ésta junto con Kirchner y sus secuaces, ya estaban preparando la represión indiscriminada.
Quieren esconder su responsabilidad de que esa lucha haya quedado aislada por su negativa a constituir allí, con todas las organizaciones obreras y piqueteras que esas corrientes dirigen e influencian, un Comité de lucha nacional que rompiera el aislamiento impuesto por la burocracia sindical y transformara la resistencia de los obreros, las heroicas mujeres y el pueblo de Las Heras en el primer paso de una lucha nacional contra las paritarias del 19%. Trescientas organizaciones obreras y políticas estuvieron reunidas en Las Heras y sólo expresaron “solidaridad”.
Quieren ocultar que luego, cuando la lucha fue derrotada, las corrientes de la izquierda reformista se dedicaron a abrir locales y prepararse para sus campañas electorales en esa ciudad, mientras las familias de los presos pasan hambre, mientras la desesperación empuja incluso a las esposas de los presos al intento de suicidio.
Son la izquierda de Navarro, porque no han denunciado una sola vez que este traidor fue eximido de prisión y no movió un solo dedo para defender a los mismos compañeros obreros que lo liberaron de la cárcel.
Esto es lo que quieren ocultar, con su escandaloso silencio, estas corrientes y estos dirigentes reformistas, los mismos que llevaron a cada uno de los heroicos combates de la resistencia obrera en Argentina, como el de Jabón Federal, el Hospital Francés, etc., a los pies del ministerio de trabajo, de las legislaturas y parlamentos, de la justicia burguesa y, en definitiva, de la burocracia sindical traidora de la CTA y la CGT. Son los mismos que, ahora quieren “organizar a las organizaciones obreras” pero para subordinarlas al “espacio Memoria, Verdad y Justicia”, que es una organización de colaboración de clases donde los trabajadores no pueden imponer su voluntad de lucha. Se ubican como el “ala izquierda” del “frente democrático” y del plan de “reconciliación” con las Fuerzas Armadas de Kirchner, negándose a que sea la clase obrera, con sus organizaciones y sus métodos de lucha, la que tome en sus manos el combate por el juicio y castigo a todos los genocidas y represores y por la aparición con vida de Julio López.
No es de sorprender, tratándose de las mismas corrientes que se arrodillan ante gobiernos patronales como el de Chávez y que ahora le dan directamente ministros; que se arrodillan ante la burocracia castrista que se apresta a restaurar el capitalismo en Cuba; que llamaron a votar a Evo Morales en Bolivia; que festejan como “una victoria de las masas” el triunfo electoral de los carniceros imperialistas del Partido Demócrata en Estados Unidos; que pregonan la estafa de la “revolución bolivariana” e integran esa cueva de traidores de la clase obrera mundial que es el Foro Social Mundial. Son la “izquierda” de Tomada y del traidor Navarro del PC; son, en definitiva, la izquierda del kirchnerato.
Los presos de Las Heras son hermanos de los más de 500 luchadores antiimperialistas sobrevivientes de las masacres de Kunduz y Mazar-i-Sharif en Afganistán, que están encerrados en la prisión yanqui de Guantánamo y también sometidos a la tortura. Hermanos de lo mejor de la resistencia iraquí, confinada en decenas de cárceles del régimen de ocupación angloyanqui, y de los martirizados presos palestinos. Hermanos de los cientos de campesinos sin tierra que bajo el gobierno cipayo de Lula-Alencar, se pudren en las cárceles de Brasil, mientras todos los días las guardias blancas de los terratenientes, junto a la policía, los reprimen y asesinan. Los luchadores de Las Heras son hermanos de los comuneros que hicieron justicia con el alcalde corrupto del pueblo de Ayo Ayo en Bolivia, y que el gobierno de colaboración de clases de Evo Morales mantiene presos, mientras negocia con los gobernadores “autonomistas” y con la burguesía de Santa Cruz, cuyas bandas fascistas vienen de cobrarse otra vida obrera y campesina en Cochabamba.
Son hermanos de los luchadores antiimperialistas que se movilizaron en Uruguay contra la visita de Bush a ese país y fueron encarcelados por el gobierno de Tabaré Vázquez y el PC en el Frente Amplio. Y también de los encarcelados en Chile por la “socialista” Bachelet, que llena sus mazmorras de presos campesinos de origen mapuche, y reprime ferozmente a la juventud sublevada y las luchas obreras, deteniendo a trabajadores, como lo han hecho con los mineros de empresas contratistas de El Teniente y La Andina, y por miles a los combativos estudiantes secundarios. Son hermanos de los comuneros de Oaxaca, México, presos por levantarse contra el régimen del fraude y el TLC. Hermanos de los trabajadores y el pueblo de Haití ocupado y transformado en una verdadera “cárcel” por las tropas gurkas de ocupación de Kirchner, Lula, Bachelet, que no dudaron en acudir a cumplir las órdenes de su jefe Bush de que mantengan el “orden” en su protectorado, reprimiendo al pueblo, mientras él tiene a sus tropas masacrando en Irak.
La lucha por arrancar de las cárceles de todo el mundo a los luchadores obreros y antiimperialistas presos en las garras de la burguesía, no puede tener fronteras ni descanso y es una cuestión de principios para todos los luchadores obreros y populares.
Tenemos que arrancar de las garras de las clases enemigas a nuestros hermanos de clase que la burguesía mantiene como rehenes, porque cada día que ellos continúan en la cárcel y no se lucha por liberarlos, significa un paso adelante para nuestros enemigos de clase.
Los firmantes de esta declaración, integrantes de la Fracción Leninista Trotskista (FLT) hacemos un llamamiento a organizar una gran campaña y movimiento de lucha obrera e internacionalista por la libertad de los presos de Las Heras.
Hoy, a un año de lo sucedido, 7 trabajadores siguen pudriéndose en las cárceles del régimen; la ciudad sigue ocupada por tropas de la gendarmería y los pozos custodiados por la policía. ¡Fuera la gendarmería y los organismos de represión de Las Heras! ¡Libertad a nuestros compañeros presos! Debemos conocer sus nombres y levantarlos como bandera: ¡Libertad a nuestros compañeros Rosales, Bilbao, Pérez, Cortés, Catrihuala, Padilla y González!
Llamamos a las organizaciones obreras, campesinas y estudiantiles, y en especial a la juventud obrera, a poner en pie esta campaña internacional, a preparar y coordinar una gran jornada de lucha obrera internacionalista para el 7 de febrero.
En Argentina, llamamos a las organizaciones que se reivindican de los trabajadores y el pueblo, a los trabajadores que están en lucha como los del Hospital Francés y ferroviarios, a las internas y cuerpos de delegados arrancados a la burocracia sindical como el Garrahan, subterráneos, los ceramistas de Neuquén, a los integrantes de las listas opositoras de la CTA (que agrupan a más de 150 organizaciones obreras y de lucha), a los opositores en los gremios de la CGT, a los movimientos piqueteros no oficialistas, etc. -organizaciones que tienen en sus filas miles de compañeros procesados o perseguidos-, a que juntos levantemos esta campaña.
Con muchos de ellos hemos marchado en acciones por la aparición de Julio López. Llamamos a coordinar inmediatamente en un Comité de Lucha a todos los que están dispuestos a levantar esta bandera, primer paso en el camino de recuperar la unidad de las filas obrera para luchar, derrotando a la burocracia sindical y conquistando un congreso de delegados de base de trabajadores ocupados y desocupados, que pelee por organizar un paro activo nacional con piquetes, movilizaciones y cortes de ruta, hasta que liberen a los presos de Las Heras, aparezca con vida Julio López y desprocesen a todos los luchadores obreros y populares.
Llamamos a todas las organizaciones obreras, campesinas y estudiantiles de América y el mundo a tomar en sus manos esta lucha por la libertad de los presos de Las Heras, rehenes de las voraces petroleras imperialistas y del gobierno de Kirchner, sirviente de Bush. Las llamamos a pronunciarse firmando proclamas y llamamientos, a hacer acciones frente a la embajada y consulados de Argentina, a enviar telegramas de repudio y exigiendo la libertad de los presos de Las Heras, a hacer actos y mítines con este objetivo, a impulsar medidas como paros, movilizaciones, etc., allí donde se tenga la fuerza para ello.
Llamamos en especial a nuestros hermanos de clase bolivianos, los obreros y campesinos sublevados en Cochabamba y organizados en su Cabildo Abierto, a los heroicos mineros de Huanuni, a los obreros y explotados de El Alto y sus organizaciones, a los estudiantes revolucionarios de Oruro, El Alto y Cochabamba, a hacer suyo este combate. Llamamos a nuestros hermanos de clase de Chile, a los mineros de El Teniente, La Andina y Escondida y sus organizaciones de lucha; a la heroica juventud que con su levantamiento sacudió el país de norte a sur, a los campesinos pobres de origen mapuche que luchan por recuperar sus tierras de manos de las transnacionales y los terratenientes y por arrancar de la cárcel a sus compañeros presos, a que tomen en sus manos e impulsen esta campaña internacional.
Llamamos a nuestros hermanos de clase de Brasil, a la vanguardia obrera que enfrentando al gobierno de Lula y a la burocracia de la CUT; a las organizaciones de los campesinos sin tierra que sufren día a día represión y persecución; a los obreros y explotados de México que hoy luchan en defensa de la heroica Comuna de Oaxaca y por la libertad de más de 500 comuneros detenidos, y a todas las organizaciones obreras, campesinas y estudiantiles combativas de América Latina, a que inscriban en sus banderas de combate y como parte de su lucha la demanda de libertad a los presos de Las Heras, e impulsar acciones y la coordinación de la pelea para lograr ese cometido.
Llamamos a la vanguardia obrera y a los obreros inmigrantes latinos de los Estados Unidos que resistan el intento de las direcciones del Foro Social Mundial de arrodillarlos ante el Partido Demócrata, a que tomen e impulsen esta campaña internacional desde los locales sindicales arrebatados a la burocracia de la AFL-CIO, desde sus organizaciones de lucha contra la guerra en Irak, desde sus comités por los derechos de los trabajadores inmigrantes, etc.
A todos ellos, los llamamos a impulsar desde ahora mismo, una gran jornada obrera de lucha internacional por arrancar de las mazmorras de la Repsol, el gobierno de Kirchner y el régimen infame, a nuestros compañeros presos de Las Heras.
√ ¡LIBERTAD A LOS PRESOS DE LAS HERAS Y A TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS!
√ ¡APARICION CON VIDA DE JULIO LOPEZ!
√ ¡DESPROCESAMIENTO DE TODOS LOS LUCHADORES OBREROS Y POPULARES PERSEGUIDOS!
√ ¡JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS GENOCIDAS DE AYER Y A LOS REPRESORES Y ASESINOS DE OBREROS DE HOY!
EL 7 DE FEBRERO DE 2007:
¡IMPULSEMOS UNA GRAN JORNADA OBRERA DE LUCHA INTERNACIONAL!
Octubre Rojo Internacionalista (ORI), Bolivia
Partido Obrero Internacionalista – Cuarta Internacional (POI-CI), Chile
Fracción Trotskista
(Vanguardia Proletaria) (FT-VP), Brasil
Grupo de los Obreros Comunistas (CWG), Nueva Zelanda
Liga Trotskista Internacionalista (LTI), Perú
Liga Obrera Internacionalista-Democracia Obrera (LOI-CI), Argentina
Integrantes de la
Fracción Leninista Trotskista